Desde Barna, con amor :)

Ya está, ya has llegado a la cima de nuestra montaña. Ahora te toca seguir subiendo. Una nueva montaña aún más grande. Un pico más difícil. Yo prometo encontrarme contigo en lo más alto, lo prometo. Déjate atrapar por los encantos de mi norte pero regresa prontito a nuestro sur. Sonríe la primera vez que te pongas una bata blanca y cada vez que escuches el sonido de un corazón. Sé feliz :)
[..Victoria, V]

Y siempre es una palabra que suele utilizarse mucho. Incluso a veces la utilizamos sin una verdadero significado. Como algo banal, intrascendente. Y no pensamos en la importancia que realmente encierra. Porque siempre suena cursi, raro, exagerado; pero, como tú dices, para nosotras es algo obvio, algo que no vamos a dejar que cuestione ni siquiera la distancia o el paso del tiempo. Conoce hasta la última esquina de Barna, hasta el último monumento, hasta el último sitio chic barcelonés, e imagínanos paseando por allí.
Te quiero.
[..Alaia, A]

Sé que lograrás ser en la vida todo lo que te propongas, aunque sea en el fin del mundo, porque confío en tí, y te mereces todo lo mejor. Podría decirte muchas veces que te echaré de menos, pero creo que ni yo misma me hago una idea ahora mismo. Nos volveremos a ver dentro de muy poco, vendrán más y mejores fiestas, fotos y sonrisas por doquier, llamadas a altas horas de la madrugada, abrazos no vacíos, y tendremos más ganas de vernos la próxima vez. Además, siempre han bastado las miradas para comprendernos, ¿no?.
Te quiero mucho, mucho, mucho... y así sucesivamente ^^
[..Eu, E]

Lo más curioso de todo, y no tengo ninguna duda de ello, es que todas nuestras historias empezarían y acabarían con una sonrisa. Y, ¿sabes? no cambiaría nada.
Gracias por hacerme alcanzar la felicidad al cantarme bajito en cualquier sitio, por tus cosquillitas, por las risitas raras en el agua en esas tardes de playa, por los días de película, por estar ahí sin importar cuándo, dónde y cómo...
¿No te he dado suficientes razones por las que te voy a echar de menos? Quizás falte la más importante. Porque te quiero... te quiero muchísimo.
[..Marta, mi gordigor]

Me quedo con cada gesto y con cada detalle, con los que me has enseñado que no hace falta una eternidad para aprender a querer a alguien.
Y, en Granada o Cádiz...
[..Irene, mi liebe]

Gracias, por ser como sois, por estar a mi lado incluso a cientos de kilómetros.
No podíais haberme dado un regalo mejor :)
Os quiero muchísimo.

..Una amistad capaz de seguir intacta a pesar de todas las ciudades que se interpongan entre ellas.